El agua de coco verde, además de ser muy sabrosa, posee múltiples beneficios para tu salud. Vamos a mencionar sus propiedades para que, cada vez que tengas la oportunidad, no dejes de disfrutar esta bebida 100% natural.
– Es considerada una bebida isotónica, hidrata tu organismo y tiene más electrolitos que las bebidas deportivas. Es ideal para reponer los electrolitos perdidos los días de calor o cuando haces ejercicio (sodio, calcio, hierro, fósforo y potasio). El agua vegetal que contiene el coco es pura, así que si te encuentras en una playa y no tienes nada para beber, los cocos van a proveerte de una variante exquisita de agua potable.
– El calcio, el hierro, el zinc, el magnesio, el potasio y la vitamina C contenidos en el agua de coco, son importantes minerales para la función cognitiva cerebral.
– La vitamina C presente en el agua de coco es a su vez antioxidante, protege las células de los daños causados por los radicales libres.
– Ayuda al sistema inmunológico ya que posee triglicéridos de cadena media con propiedades antimicrobianas, evitando la proliferación de hongos, virus y bacterias.
– El agua de coco contiene una cantidad considerable de fibra (2.6 gramos en 240 ml) estimulando el tránsito intestinal y favoreciendo el equilibrio de su flora.
– Ayuda a regular la presión arterial, si bien tiene sodio, también posee más potasio que las bananas, lo cual neutraliza el efecto del sodio ayudando a nivelar la presión y por lo tanto disminuyendo el riesgo cardíaco.
– Posee muchas enzimas bioactivas naturales como la fosfatasa ácida, catalasa, deshidrogenasa, diastasa, peroxidasa, ARN-polimerasas, entre otras, ayudando en la digestión y el metabolismo. Mejora la acidez y el reflujo, ya que calma la irritación ocasionada por la acidez estomacal.
– Contiene citoquinina que promueve la regeneración celular, contribuyendo a evitar el envejecimiento de la piel y el pelo y ayudando a eliminar el exceso de grasa presente en la piel. También puede utilizarse mediante aplicación directa para limpiar el cutis y combatir los granitos.
– Ayuda a regular el colesterol, porque disminuye placas de ateroma en el interior de las arterias.
– El calcio y el magnesio presentes en el agua de coco contribuyen con la salud muscular, favoreciendo la prevención y el tratamiento de calambres.
– Regula la secreción de insulina en el organismo, equilibra los altos niveles de glucosa en la sangre. El agua de coco posee 55 calorías cada 330 ml.
– Ayuda a combatir la resaca después de una noche de fiesta, reponiendo electrolitos, ayudando a limpiar el hígado y a eliminar toxinas.
– Estimula el funcionamiento de los riñones y la eliminación de cristales. El agua de coco actúa en la prevención y en el tratamiento de las piedras renales.
No debemos confundir el agua de coco (que es practivamente transparente), con la pulpa de coco (su carne de color blanco con una fina piel marrón), con la leche y la crema de coco. La leche y la crema de coco se elaboran rallando y filtrando pulpa de coco con agua. Lo que flota en la superficie luego de su refrigeración es la crema, y lo que permanece abajo es la leche.
En la segunda guerra se ha utilizado agua de coco por vía intravenosa para hidratar pacientes, puede servir de reemplazo a la solución salina en situaciones críticas ya que posee un balance de sales minerales similar al plasma humano.
Es ideal tomar el agua de coco fría sobre todo cuando hacemos ejercicio para reemplazar los electrolitos perdidos. Si en tu país el coco natural no es tan fácil de encontrar, hay alternativas envasadas con las mismas propiedades. Asegúrate de elegir las que son 100% naturales, orgánicas, sin azúcar o agua añadidos.