En tu viaje a Rarotonga, Islas Cook es interesante conocer los diferentes establecimientos hoteleros y recorrer sus hermosas playas. Acá vamos con la reseña del restaurante ubicado en The Rarotongan Beach Resort & Lagoonarium, uno de los hoteles más tradicionales de la isla. El arrecife de coral frente al hotel constituye una reserva marina (Aroa Lagoon Marine Reserve), por lo cual es un excelente lugar para hacer snorkel.
AMBIENTACIÓN El espacio del restaurante da al océano por lo cual la vista es inmejorable. Sin embargo la decoración necesitaría un restyling, los colores del mobiliario, baranda y deck no son los mejores. El lugar no tiene música funcional tampoco. El hotel cuenta con kayaks y stand up paddles para dar un paseo en la laguna, lo cual es una excelente alternativa para hacer antes o después de comer.
SERVICIO Hay mozos pero el lugar funciona bajo la modalidad de auto servicio. Te dan un dispositivo electrónico para que vayas a retirar tu plato por el sector de despacho de la cocina cuando esté listo. Cabe destacar que el staff que toma el pedido es amable y sonriente.
COMIDA & MENÚ El menú es básico, más cerca de un fast food que de un establecimiento gourmet, ciertamente esperábamos más de un hotel 4 estrellas. Sin embargo, los platos estaban bien presentados y eran sabrosos. Pedimos carne grillada con salsa de hongos que viene con papas fritas & ensalada y pollo empanado con jamón ahumado y queso, que también viene con papas fritas & ensalada.
BEBIDA El vino que pedimos estaba a la temperatura adecuada de servicio y era rico, un Sauvignon Blanc de Nueva Zelanda.
TIEMPOS Había muy poca gente y los tiempos de espera fueron reducidos.
EMPLATADO Buena presentación de la comida.
PRECIO Teniendo en cuenta que el lugar es auto servicio, el precio debería ser menor. Es razonable de todas maneras.
EXPERIENCIA GENERAL La experiencia fue positiva, sobre todo porque el entorno del restaurante es un sueño. Además, disfrutamos alimentar a los peces con los restos de nuestra comida, se juntan a esperarlos bajo el deck. El restaurante está más orientado a familias que a parejas, grupos o personas solas. Para satisfacer a ambos públicos podrían acomodar a las familias con sus hijos en los alrededores de la pileta y a las parejas y grupos en el extremo opuesto. No hay un maître que coordine este tipo de cosas, al menos no cuando visitamos el restaurante. Entendemos que al momento de nuestra visita y en un contexto donde las fronteras están cerradas y no hay turistas en la isla, el menú sea reducido. No obstante, un hotel 4 estrellas no debería bajar la calidad y la categoría del servicio.
Nuestras sugerencias para el establecimiento serían modificar la combinación de colores del restaurante, ofrecer opciones gourmet, poner música funcional (sobre todo para que no lleguen al restaurante los gritos de los niños) y cambiar el auto servicio por una atención personalizada acorde a un hotel 4 estrellas. Se podrían organizar shows de música en vivo y buffet temáticos con un precio fijo para lograr una mayor convocatoria. Mejoraría la experiencia que reciban a los invitados con una copa de bienvenida.